Jarra de cerámica castreña
Sin fondo pero reconstruida totalmente. Tiene borde hacia fuera, con una asa de sección rectangular en la pared, que tiene una ligera carena en el tercio inferior. Lleva una decoración impresa de líneas de puntos haciendo zigzag, entre otras dos líneas paralelas por debajo del borde. La pieza es de color negro con manchas ocres por el exterior y está hecha de pasta ocre con degrasante arenoso de cuarzo.
Entre las diversas formas cerámicas de tradición castreña presentes en el castro, se pueden destacar las jarras, comúnmente con una sola asa, que son de tamaño mediano, con boca en general ancha y a veces, como en este caso, portando una decoración típicamente castreña a base de motivos geométricos combinados, impresos o incisos. Se interpretan como piezas de uso doméstico tanto para la cocina cómo para la mesa y para todo tipo de alimentos (líquidos, pastosos, áridos, etc).